“Vamos a compartir durante casi un mes la vida con una de las comunidades atendida por uno de nuestros misioneros: la parroquia San Antonio en Quevedo, a cuyo servicio está Paulino Ordax”,explicaba el rector a nuestra compañera de medios de comunicación de la diócesis, justo antes de partir. “Para vivir una bonita experiencia intentaremos hacernos uno con aquellas personas con quien vamos a compartir. Como bien dice el refrán castellano: allí donde fueres, haz lo que vieres. Todo lo que allí te rodea es, normalmente, muy diferente a lo que estamos acostumbrados, pero por otra parte muy gratificante y enriquecedor”.
Aitor, Fran y Alex irán informando de su experiencia y sus tareas en aquellas comunidades, “porque sabemos ya por el año pasado que, aunque estemos situados en esta parroquia, tendremos contacto con otras muchas del mismo pueblo y de pueblos cercanos”.
También, aunque ya no es seminarista, Carlos Olabarri –ordenado presbítero diocesano el pasado mes de junio- marcha esta semana a Perú, en concreto a Alto Trujillo, para colaborar con Aitor Esteban, otro de nuestros misioneros que desempeña allí su labor.
En la imagen tomada el año pasado aparecen Aitor Uribelarrea y Fran Pinilla, junto a los presbíteros de Bizkaia Joseba Segura (que regresará a Bilbao tras varios años en Ecuador) Paulino Ordax, con el que compartirán la experiencia de este mes y otro presbítero ecuatoriano.