Partimos de la experiencia vivida por quienes desde diferentes lugares, tiempos y formas han comprobado que “LA MISIÓN TE CAMBIA - MISIOAK ALDATZEN ZAITU”. Esta frase nos ha parecido un buen lema para la campaña de este año.
Salir de lo propio, acercarse a quienes más sufren y compartir el tiempo, la fe, la propia persona, el poner rostro a esos hermanos y hermanas… nos cambia, nos hace más conscientes de lo que tenemos (oportunidades, conocimiento, recursos…) y nos invita a asumir compromisos en nuestra vida diaria, ser sal y luz.
La próxima semana, llegarán las Voces del Sur, desde Kenia. y tendremos la oportunidad de escuchar su testimonio en diferentes ámbitos diocesanos de Bizkaia , Alava y Gipuzkoa.